El objetivo de la microinmunoterapia es preparar al sistema inmunitario para que sea capaz de frenar por sí mismo posibles agresiones internas o externas que puedan debilitarlo, como son las infecciones virales. Tanto las que llegan a ti por primera vez como las que sufres de forma cíclica, como es el caso del herpes labial.

Sin embargo, para que esta inmunoterapia actúe correctamente, es esencial seguir al pie de la letra su método de administración: sublingual y secuencial.

¿Por qué es tan importante seguir estos pasos?

Porque son los que utiliza la microinmunoterapia para entrenar la inmunidad y fomentar una respuesta que no sea puntual, sino duradera en el tiempo.

La administración secuencial activa la reacción en cadena

¿Conoces el efecto dominó? Le das un toque a la primera pieza y el resto cae de forma secuencial.

Así funciona nuestro sistema inmunitario. Y así lo imitan los medicamentos de microinmunoterapia.

Cuando las células inmunitarias detectan un elemento extraño comienzan a liberar citoquinas. Estas moléculas entran en contacto con otro tipo de células (la segunda pieza del dominó) para que liberen nuevas citoquinas, que a su vez activarán a un tercer grupo de células (la tercera pieza). Y así sucesivamente.

La información pasa de una célula a otra de forma secuencial y lo que hacen los medicamentos de microinmunoterapia es replicar este mecanismo gracias a su composición y posología.

La administración sublingual abre las puertas del sistema inmunitario

Este tipo de administración consiste en depositar los medicamentos bajo la lengua y dejar que se disuelvan y se vayan absorbiendo hasta desaparecer.

Se trata de un método con multitud de ventajas, especialmente para la microinmunoterapia:

  • Es fácil, seguro y accesible para todo tipo de pacientes: niños, mayores, personas con dificultad para tragar, etc.
  • Favorece el acceso rápido y directo al sistema inmunitario gracias a la permeabilidad, la buena irrigación de flujo sanguíneo y la presencia del sistema linfático en la zona.
  • Tu cuerpo absorbe el tratamiento con más facilidad y se evitan efectos secundarios, ya que no pasa por el hígado.
  • Al no entrar en contacto con enzimas y ácidos, es adecuado para personas con trastornos digestivos.

Cómo tomar un tratamiento de microinmunoterapia

Para tomar los medicamentos de microinmunoterapia, sigue estos consejos.

1. Toma secuencial

Cuando abres una caja de un tratamiento de microinmunoterapia, encuentras 3 blísters con 10 cápsulas numeradas y de diferentes colores. Esto indica que las cápsulas tienen composiciones diferentes.

Cada cápsula contiene las mismas citoquinas que utilizan tus células para avisar o responder al ataque de otras células del sistema inmunitario, de un virus o de otro patógeno, pero con una formulación distinta dependiendo de si imitan a las células que dan el primer aviso o a las que se encuentran en segunda o tercera línea de defensa. Además, la composición de los medicamentos dependerá también de si el objetivo es suprimir, bloquear, activar o regular la respuesta inmune.

Por eso es tan importante respetar el orden de la secuencia y seguir estos pasos:

  • Saca un blíster de la caja.
  • Realiza las tomas siguiendo la numeración de las cápsulas, del 1 al 10.
  • Cuando finalices un blíster, empieza el siguiente por la cápsula nº 1.

Todos los blísters son iguales y los colores de las cápsulas te servirán de guía y te ayudarán a evitar confusiones si alguna de ellas se sale del envase. Además, los números facilitan la distinción de las cápsulas para personas con daltonismo.

2. Toma sublingual

La administración sublingual de microinmunoterapia es muy sencilla:

  • Con la cápsula en vertical, gira y separa su cabeza hacia arriba con cuidado para no perder su contenido.
  • Deposita bajo la lengua el contenido de la cápsula, unos pequeños glóbulos.
  • Deja que se disuelvan poco a poco bajo tu lengua.

En este gráfico te mostramos el proceso de forma visual:

Para que el tratamiento actúe de forma adecuada, evita tragar estos glóbulos, masticarlos o ingerir las cápsulas enteras.

A qué hora tomar la microinmunoterapia

El momento del día para administrar el tratamiento también influye en la eficacia de la microinmunoterapia.

Según las tomas diarias que te haya recomendado tu profesional sanitario, desde Labo’life te recomendamos:

  • 1 cápsula al día: preferiblemente por la mañana, en ayunas (de 15 a 30 minutos antes del desayuno). En su defecto, entre 15 a 30 minutos antes de la comida o una hora después de esta.
  • 2 cápsulas al día: la primera en ayunas y la siguiente 15 o 30 minutos antes o una hora después de la comida.
  • 2 medicamentos de microinmunoterapia diferentes: separa los tratamientos como en el caso anterior, uno de ellos en ayunas y el otro 15 o 30 minutos antes de la comida o 1 hora después, y procura que hayan pasado al menos 2 horas entre cada medicamento.

En cualquier caso, te aconsejamos que sigas siempre las indicaciones de un profesional sanitario, dado que podrá hacerte recomendaciones de acuerdo a tu situación particular.

Deja tu comentario


¿Quieres seguir descubriendo tu sistema inmunitario?

Suscríbete a la newsletter trimestral y te contaremos todas las claves sobre tu sistema inmune: sus funciones, importancia y cómo cuidarlo.